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Vivienda Habitual: Cómo Sabe Hacienda Dónde Vives | tax-down

En resumen, qué es gerundio

La Hacienda evalúa si tu hogar es habitual tomando en cuenta diferentes criterios: residencia efectiva y continua por un periodo mínimo de tres años, coincidencia entre el domicilio fiscal y el de empadronamiento, y consumo de servicios básicos. Te mostramos cómo satisfacer estas condiciones para aprovechar deducciones fiscales y que tu declaración represente de manera precisa tu vivienda habitual, evitando así sanciones y devoluciones, sobre todo si tus documentos fiscales y de empadronamiento no coinciden.

Al momento de llevar a cabo la declaración de la renta, se presenta un concepto que es tan fundamental como, en ocasiones, complicado de definir: vivienda habitual. ¿A qué hace referencia exactamente Hacienda con residencia habitual? A pesar de que ha sido mencionado en numerosas deducciones, aún subsisten muchas dudas al respecto. ¡Y es realmente importante comprender su significado! De lo contrario, ¡podrías estar renunciando al beneficio de ahorrar el dinero de la deducción que siempre es útil!

Para tu fortuna, ¡tu héroe fiscal, TaxDown, ha llegado para aclarar todas las dudas! En este artículo, te contamos cómo Hacienda saber cuál es tu vivienda habitual, proporcionándote todas las herramientas necesarias para que, al concluir su lectura, ¡ningún tema te quite el descanso!

Primero, ¿qué se entiende por vivienda habitual?

Sin duda, la primera noción que surge es que la vivienda habitual es aquella en la que vives durante todo el año, mientras que la segunda residencia es la que solo empleas para disfrutar de las merecidas vacaciones en verano o en los días festivos.

¡Bueno, amigo! ¡Ojalá fuese tan sencillo!

Hacienda determina un conjunto de condiciones que tu residencia debe satisfacer para poder ser considerada hogar habitual. 

Lo primordial que debe satisfacer tu hogar es que haya sido tu lugar de residencia durante, al menos, ¡tres años! Este requisito solamente no será considerado en las siguientes situaciones: muerte, contrato de matrimonio, separación, cambio de trabajo, inicio del primer empleo (o cambio de este) y mudanza a otra residencia, siempre que la anterior no sea apropiada debido a una discapacidad del contribuyente.

¡Pero espera, que existe otra condición! Además, deberás haber residido en ella, ¡de manera efectiva y permanente!, en un plazo no superior a doce meses desde el instante de la adquisición, ¡o desde que concluyeron las obras requeridas para su utilización!

¡Y atención, que todavía existe otro aspecto a considerar! También se consideran como vivienda habitual una o dos plazas de garaje, siempre que se satisfagan dos condiciones: deben hallarse en el mismo inmueble que tu residencia habitual y deben haber sido compradas simultáneamente con esta. 

¡Qué forma tan complicada tiene la Agencia Tributaria de hacer las cosas, ¿verdad?! ¡Y nosotros que solo deseamos relajarnos en el sofá de nuestro hogar con una bebida fría después de un largo día de trabajo! Menos mal que con nuestra asistencia puedes eliminar muchos problemas de tu mente, porque de lo contrario ¡Qué lío!

¿Cómo logra Hacienda determinar la ubicación de tu residencia habitual?

Al llegar a este momento, te estarás preguntando: ¿de qué manera logra Hacienda averiguar que tu propiedad se ajusta a los criterios señalados? ¿Acaso la Agencia Tributaria tiene habilidades psíquicas? ¡No, compañero! Pero sí es muy indagadora ¡Y considerablemente! 

El primer paso en la investigación de Hacienda consiste en la verificación de tu dirección de empadronamiento en el censo. Ya sabes, ese registro administrativo que indica a todos los habitantes habituales y permanentes de un municipio.

El siguiente factor que capta la atención de Hacienda es el domicilio fiscal, o sea, la dirección que empleas en tu declaración de la renta. Esto implica verificar si el domicilio fiscal y la dirección de empadronamiento son los mismos. ¡Y no pienses que Hacienda pasa por alto este tipo de información! ¡Para nada! Es tan cautelosa, que ha desarrollado una base de datos donde anota tooodos los domicilios fiscales de los contribuyentes. Ufff ¡Qué gran labor!

Adicionalmente, este Sherlock Holmes de las finanzas examina tu consumo de suministros. ¡De verdad que lees con atención, no se escapa nada! Revisará tus recibos de la electricidad, el gas y el agua para establecer si has estado habitando en la dirección que proporcionas en la declaración de impuestos o no. 

¡Pero espera! ¡Que aquí no termina todo!

La Agencia Tributaria todavía podrá determinar tu residencia habitual verificando un par de aspectos adicionales: la lejanía a tu lugar de trabajo y de tu centro de salud. De esta manera, tu residencia habitual será aquella que se encuentre más cerca del municipio en el que desarrolles tu trabajo y del centro de salud donde estés registrado más cercano.

Una casa encima de tu declaración de la renta con una calculadora y un lápiz al lado representando que Hacienda sabe cuál es tu vivienda habitual

Aspectos que necesitas conocer para evitar inconvenientes con Hacienda

Si estás considerando aprovechar alguna de las deducciones por la residencia habitual ¡Toma muchísimo cuidado! La Agencia Tributaria no pasa por alto los errores al momento de indicar la residencia habitual en las declaraciones de IRPF ¡Más bien todo lo opuesto! 

Es fundamental que, en tu declaración de impuestos, indiques adecuadamente cuál es tu lugar de residencia habitual. ¡Principalmente si has obtenido alguna deducción! ¡Atención, sabemos de qué estamos hablando! Si te beneficias de una deducción por tu vivienda habitual y, posteriormente, Hacienda se da cuenta de que esa vivienda no es tu domicilio habitual. ¡Prepárate para devolver el importe íntegro de la deducción más un importe adicional del 50%!

Por esta razón, es sumamente relevante que evidencies que el inmueble que aparece en tu declaración de la renta es, de hecho, tu residencia principal. De no ser así, la Agencia Tributaria tomará en cuenta que tu hogar habitual será aquel que se encuentre en el sitio donde generas tus ingresos. Si aun así no se logra determinar cuál es tu residencia, se examinarán tus últimas declaraciones del IRPF para usar la que esté consignada en ellas.

¡Y precaución! Porque la Agencia Tributaria puede requerirte la devolución de la deducción si has modificado tu residencia habitual. antes de que hayan pasado tres años desde la fecha de compra o de finalización de las obras para su uso. También podrá exigirte el reembolso si no has empleado tu residencia anterior como tu domicilio habitual durante un mínimo de tres años. Y aquí no terminan los inconvenientes ¡Porque la suma a devolver variará según el caso específico! Cuantos más años hayas disfrutado de deducciones, ¡más deberás pagar! Y cuanto más tiempo hayas habitado en la residencia anterior, ¡más deberás pagar! ¡Mucha precaución, amigo! 

Finalmente, para esas situaciones donde el domicilio fiscal y el empadronamiento son diferentes, existen inconvenientes, ¡aunque, afortunadamente, también hay respuestas! Si deseas hacerte alguna deducción de IRPF, tuMeta debe ser lograr que Hacienda confirme que tu domicilio fiscal es tu residencia habitual. Como te mencionamos anteriormente, la Agencia Tributaria evaluará ciertos datos para establecer cuál es tu lugar de residencia habitual. Es en esta etapa cuando debes presentar los documentos que evidencien dónde has estado viviendo: recibos de la comunidad, certificado del lugar de trabajo, libro de familia, recibos de servicios, entre otros. Así que, te ofreceremos un consejo de compañero a compañero: ¡guarda bien estos documentos en tu carpeta favorita!

¿Dudas? Usa TaxDown

El cálculo de estos intervalos se lleva a cabo asignando los días cotizables a los períodos en los que no existió obligación de cotizar, respetando siempre el límite de cinco años en total. Estos días se incorporan al cálculo de tu pensión, lo que puede aumentar de forma notable la cantidad final que recibes.

Si todavía tienes incertidumbres sobre cómo definir tu residencia habitual, ¡no te angusties! ¡En TaxDown siempre estamos listos para asistirte con tus gestiones fiscales! Disponemos de asesores fiscales expertos en la declaración de la renta que, además de aclarar todas las inquietudes que te preocupan, ¡te aseguran el mayor ahorro!

¡Cómo lees! 

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